Historia

En 1996, Juan Arregui empezó la andadura en la elaboración de sidra en el caserío Arizia. Con la ayuda de su mujer Lourdes, trabajaban y recogían las manzanas de sus propios manzanos y poco a poco fueron adquiriendo la maquinaria necesaria para la elaboración de la sidra natural.

Para que la gente del pueblo y alrededores pudiera degustar la sidra para poder comprarla, empezaron con la actividad de la restauración. Por aquel entonces solamente servían el tradicional menú de sidrería pero Lourdes comenzó a diversificar con las croquetas caseras y la ensalada mixta.

Como el viejo caserío Arizia quedaba pequeño y necesitaban ampliar para introducir unas instalaciones modernas para poder avanzar en la elaboración, se embarcaron en un proyecto ambicioso y construyeron la actual bodega-restaurante Arizia. En ella, introdujeron la parrilla de carbón y platos más elaborados.

Los hijos ayudaban de vez en cuando mientras estudiaban, pero es cuando terminan los estudios cuando entran de lleno en el negocio familiar. Hoy en día, trabajan todos codo con codo para llevar adelante el proyecto que arrancó Juan. Él se encuentra jubilado ya, pero siempre está por allí para guiar a los hijos y transmitirle su experiencia e ideas.

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